De nuevo, otra semana más, os traemos otros 10 discos destacados de 2019. Con estos ya serían 40, a falta de un último artículo. Por aquí te dejamos los links de las partes anteriores:
Parte 1
Parte 2
Parte 3
10 discos que nos han encantado de 2019:
The Moth Gatherer – Esoteric Oppression. Esta banda de doom/post metal viene de hacer una auténtica obra maestra. Es de los mejores álbumes de la historia del género y, a título personal, diré que es de lo mejor que he escuchado jamás. Los feels de sus canciones es algo que no se puede explicar, pero me apasionan. Un disco que lo tiene todo: la garra del doom, riffs muy graves, lentos y pesados con otra guitarra melódica con un tono agudo y unas frases que ponen los pelos de punta. Por otra parte, tienen tintes del post-doom con una cantante haciendo una especie de voz celestial en “The Drone Kingdom”, con unos efectos de ambiente que no hacen otra cosa que dar más sentimiento a sus canciones. En definitiva, es un álbum que canción tras canción es brillante. Si te gusta el género y no tienes prisa, es un álbum que no defrauda.
A Novelist – Folie. Es una de esas bandas de la escena del death metal progresivo que cuentan con un encanto especial si te gustan los contrastes, los cambios bruscos de ritmo, melodías trabajadas y canciones que no se quedan estancadas en simples estribillos. Así es, A Novelist con su disco “Folie”, avanza en un camino de death metal progresivo, técnico y muy elaborado traducido en arpegios místicos, introducciones parsimoniosas, que terminan por explotar según avanzan los singles, con una fuerza y con una sensación de éxtasis sublime. Un camino muy vitalista para lo que suele ser el death metal progresivo y con pequeños coqueteos con el saxofón que recuerdan a Rivers Of Nihil.
Leprous – Pitfalls. Tras el indudable éxito de «Malina», la banda noruega vuelve a la carga con un arriesgado trabajo, cuyos matices son extremadamente finos. Se trata de un álbum de rock progresivo que a primera vista resulta mucho menos atractivo de lo que realmente puede llegar a ser. Tras varias escuchas se consigue comprender y desatar todo el potencial que Leprous buscaba desde un primer momento. Es un álbum inundado en angustia y, a su vez, esperanza, que trata sobre la depresión, la ansiedad, y cómo combatirlas; probablemente de los discos más complejos y maduros de la banda. Según Einar Solberg, «Pitfalls es el resultado de 18 meses de aprendizaje sobre cómo atravesar un túnel oscuro. La música ha sido mi antorcha».
Joey Cape – Let Me Know When You Give Up. Es imposible hablar de la carrera de Joey Cape (Lagwagon) en solitario sin rememorar la figura del tristemente fallecido Tony Sly (No Use For A Name). Ambos artistas han representado siempre el lado más íntimo del sello Fat Wreck Chords y este disco es una grandísima demostración de lo que más le gusta hacer y lo que mejor se le da a Joey Cape, que es cantar con una guitarra acústica en la mano. Cabe destacar que este año ha sido de una enorme productividad artística para el músico californiano, puesto que en menos de 6 meses ha publicado disco en solitario y un nuevo LP con su inmortal banda Lagwagon.
Tides From Nebula – From Voodoo to Zen. Esta magnífica banda polaca ha sacado su 5º álbum, “From Voodoo To Zen”. Un disco de puro post rock/metal que es instrumental, parsimonioso, lleno de sentimiento y que cuenta con unos acompañamientos de sintetizador que le dan un toque muy moderno y hacen del disco una pieza muy agradable de escuchar: la emotividad es su gran virtud.
Insomnium – Heart Like a Grave. Sin lugar a dudas, uno de los grupos de death melódico más queridos del panorama actual, y nos lo recompensan acordándose de nosotros a la hora de girar por nuestro país año tras año. Nos traen su octavo álbum que, tras el exitazo del álbum conceptual «Winter’s Gate» dejaron el listón muy alto. Con «Heart Like a Grave» no decepcionan; nos vuelven a transmitir la esencia «Insomnium». Muchos dirán que no arriesgan, que este disco no es nada innovador; Insomnium ha logrado dar con la fórmula de un estilo que les caracteriza y con un público leal que les aclama.
Vita Imana – Bosa. Huelga decir que Vita Imana es de las bandas más queridas del panorama español y es que no es para menos. Su nuevo disco Bosa ha sido una especie de reto para la banda que venía de perder a su reconocido vocalista y a uno de sus guitarras. El álbum tiene un toque más agresivo, en parte por su nuevo vocalista (con una voz más bruta), y se trata de un disco mucho más directo, los temas impactan a la par que los riffs y el sonido poderoso de sus guitarras.
Whitechapel – The Valley. Entre los pioneros del deathcore, la banda Whitechapel de Knoxville se ha alejado de los clichés típicos del deathcore para acercarse a unos tempos más lentos acordes a la temática nostálgica y traumática que escribe Phil Bozeman sobre su infancia en el Valle de Hardin. Por ello hay más voces limpias que en sus seis álbumes anteriores como se refleja en Hickory Creek. Sin embargo, no faltan sonidos más tradicionales guturales, melodías ambientales, solos de guitarra y riffs adictivos, puentes agresivos y breakdowns como We Are The One.
Shadow Of Intent – Melancholy. Sú último LP, “Melancholy”, es uno de los álbumes más trabajados de todo el 2019 y es un antes y un después en el mundo del metal extremo, así como lo fue en 2017 su anterior disco, el “Reclaimer”, un disco histórico para el deathcore. “Melancholy” es un LP que ha mutado su estilo y, aunque sigue siendo deathcore sinfónico, es un disco que por momentos recuerda más que nunca a Dimmu Borgir. También se percibe una evolución en la agresividad; de hecho, es más que significativo que este disco no tenga ni un solo breakdown. En cualquier caso, es una obra maestra, es un disco de brillantez técnica y de riffs espectaculares y cañeros, con unos coros y acompañamientos sinfónicos que no hacen más que enriquecer las canciones. Además, tienen pensado el principio, el desarrollo y el desenlace, es un disco que tiene más sentido escuchar en su estricto orden y que te lleva a un final apoteósico con dos singles brillantes que cierran el disco de una forma sensacional. Cabe destacar que uno de estos singles es una canción instrumental de 10 minutos donde la banda despliega su capacidad compositiva y que no deja indiferente a nadie.
Thank You Scientist – Terraformer. Thank You Scientist son uno de los mejores exponentes de este nuevo boom del rock y metal progresivo que hemos vivido esta última década. Los de New Jersey siempre han apostado de forma abierta por sonidos muy próximos al jazz, pudiéndose clasificar más como una banda de jazz-fusión que como una banda de metal progresivo ortodoxa. En este nuevo trabajo la banda continúa expandiendo sus límites musicales, habiendo grandes guiños al rock progresivo de los 70’s o a bandas más modernas como The Mars Volta, consiguiendo que su tercer trabajo continúe la senda ecléctica escogida por la banda y que te consigue hacer volar por varios géneros en apenas unos pocos minutos.