Poppy Top 2020

Top 10 discos 2020 (Musti)

2020 ha sido un año profundamente complicado y complejo para todo el mundo. El estallido de la pandemia de covid-19 en el mes de marzo trastocó el mundo por completo, afectando de sobremanera al sector de la cultura. Solo pude acudir a dos conciertos en directo -Lendakaris Muertos y Monster Magnet-, y desgraciadamente para todos, creo que pasará mucho tiempo hasta que esto vuelva a una situación medianamente normal, por lo que este artículo está profundamente marcado por todo lo acaecido este año.

MEJORES DISCOS:
Esta sección del top de los mejores discos ha sido dividida en tres categorías: El disco del 2020, los otros 9 discos más importantes (ordenados alfabéticamente por nombre del artista) y las menciones de honor.

DISCO DEL 2020:

Poppy – I Disagree

Poppy, mi mayor sorpresa de este año. Puede que influyese el hecho que la primera vez que escuché este álbum (y a la propia Poppy) fue al comienzo del confinamiento, lo que hizo que un montón de sentimientos y sensaciones quedaran encerradas en mi percepción de este disco, pero es algo que nunca sabré con certeza.

Moriah Pereira, más conocida por su pseudónimo Poppy, es una artista de origen latino nacida en Boston y criada en Tennesee, cuna del country. Sus comienzos musicales estuvieron muy ligados al synth-pop con cierta influencia J-Pop, pero estos últimos años su estilo ha evolucionado enormemente.

I Disagree es el tercer trabajo de estudio Poppy, y es un disco profundamente ecléctico y difícil de clasificar. Este disco ha sido producido por Sumerian Records, quienes tienen un extraordinario olfato para fichar jóvenes promesas. En los 35 minutos y 10 canciones, la artista americana es capaz de ir desde el rock industrial y el Nu Metal hasta sonidos más propios del J-Rock e incluso al trap, todo esto bajo un estilo y unas fórmulas marcadamente poperas. Un auténtico torbellino musical que aseguro que no dejará indiferente a casi nadie.

9 DISCOS RESTANTES (ordenados alfabéticamente)

IDLES – Ultra Mono

Idles son lo mejor que le ha pasado al punk esta última década. La formación inglesa ha sido capaz de combinar el sonido post-hardcore de los mejores años de Gallows junto al mejor indie-rock británico y crear un estilo propio, profundamente crudo y honesto. Ultra Mono es el tercer trabajo de estudio de Idles, el listón estaba elevadísimo tras su dos primeros discos, y han conseguido igualarlo, incluso superarlo en algunos momentos.  

Ultra Mono, a diferencia de sus predecesores, es un disco mucho más directo y agresivo. Esos coros que veíamos en sus anteriores trabajos han desaparecido casi completamente, dejando paso a un sonido más Motorik. Pero esta evolución no ha implicado un abandono de la faceta melódica de la banda, temas como A Hymn nos demuestran que la formación de Bristol es profundamente camaeónica.

King Gizard & The Lizard Wizard – K.G

King Gizzard han conseguido la cuadratura musical del círculo. Ser una banda de producción musical exagerada, con más de 10 discos en el último lustro, y a su vez mantener un altísimo nivel, experimentando con decenas de sonidos distintos, desde el rock psicodélico hasta el doom metal. En K.G, único disco lanzado en este 2020, los australianos se alejan del rompedor sonido de Infest The Rat’s Nest (el disco metal) y vuelven a sus raíces psicodélicas, pero añadiendo una mayor cantidad de sonidos electrónicos. Prueba de ello es electrizante sonido de Intrasport. Una muestra más del ilimitado talento que poseen.

Como último apunte cabe destacar que Stu Mackenzie, guitarrista de la banda, confirmó hace unas semanas en sus RRSS que estaban nuevamente en estudio y que este año probablemente habría otro disco de sonido metal. El hype vuelve a estar por las nubes,

Less Than Jake – Silver Linings

Less Than Jake son una de las mejores bandas de ska-punk nacidas a finales de los 90’s. La banda de Florida ha conseguido forjar un sonido propio a lo largo de estos últimos 25 años, alejado pero a su vez fuertemente influenciado por el skate punk de la época.

Silver Linings es el noveno disco de estudio de los americanos, producido bajo Pure Noise Records. Al igual que sus predecesores, el sonido happy y catchy de sus canciones desborda por los cuatro costados. Un álbum que convence de principio a fin.

Este disco viene a avalar el pequeño revival que ha sufrido el skate punk estos últimos, con muchas bandas clásicas sacando discos a la altura -y en algunos momentos incluso superando- de sus mejores años de popularidad, unido a la nueva hornada de bandas que han hecho su debut estos últimos 5 años.

¡Larga viva al skate punk!

Myrkur – Folkesange

Parafraseando a Voltaire, si Myrkur no existiese, habría que inventarla. La artista danesa ha sido uno de los mayores revulsivos musicales que hemos tenido esta década. Su evolución desde el pop comercial hasta el folk metal de nuevo cuño pasando por el black es fascinante. Ya hablamos en su momento en la sección Bandas Irrepetibles sobre su trayectoria.

En Folkesange, Myrkur culmina una transformación musical de casi una década de duración para erigirse como nueva reina del folk metal, con un disco cantado íntegramente en danés y que gusta tanto a fans del rock y derivados como a un público más focalizado hacia el folk. Todo un logro.

Ozzy Osbourne – Ordinary Man

Ozzy no necesita presentación. El artista británico es probablemente la persona que más ha marcado la evolución del hard rock y el heavy metal del último medio siglo. Tras su tortuoso final en Black Sabbath inició una nueva trayectoria en solitario de la mano de su esposa y mánager Sharon, quien se ha encargado de cuidar de él en todos los aspectos. En esta etapa en solitario ha estado acompañado de aristas de la talla Robert Trujillo, Zakk Wylde, Randy Rhoads o Mike Bordin. La habilidad de Ozzy para rodearse de los mejores es digna de estudio.
Ordinary Man es algo más que un disco, es casi un legado musical que nos deja Osbourne. Probablemente este vaya a ser su último disco publicado estando él vivo, y se nota lo bien trabajo que está. Su sonido condensa perfectamente medio siglo de actividad musical ininterrumpida, con canciones que van desde un sonido catchy y de corte hard-rockero como Ordinary Man -en colaboración con Sir Elton John-, hasta canciones como Under The Graveyard, que nos hacen recordar el sonido setentero de Black Sabbath.

Incluso se ha atrevido a publicar dos temas en colaboración con Post Malone y Travis Scott, dos hombres cercanos al trap y al rap de nuevo cuño. Revolucionando e innovando hasta el último momento.

Gracias por todo, Ozzy.

Pearl Jam -. Gigaton

Pearl Jam son, desgraciadamente, los últimos supervivientes de la generación grunge que irrumpió cuan huracán tropical a principios de los 90’s en el panorama musical internacional. Si bien es cierto que Alice in Chains continúan en activo, la muerte de Layne Stanley fue un breakpoint enorme para la formación de Seattle. Pearl Jam en cambio han tenido una trayectoria ininterrumpida estas últimas tres décadas.
Gigaton es el undécimo trabajo de estudio de Pearl Jam, primero en 7 años. Un gap muy grande, debido principalmente a la dedicación de Eddie Vedder a su carrera en solitario. El sonido de este disco está profundamente alejado tanto de su época grunge noventera como de su periodo más alternativo a comienzos de los 2000’s. Estando todos sus miembros al borde de los 60 años han decidido reinventarse musicalmente una vez más.

Puscifer – Existential Reckoning

Mi relación con Maynard James Keenan es de amor-odio. Es una persona capaz de lanzar en 2018 con A Perfect Circle uno de sus mejores trabajos musicales en años, Eat The Elephant. Pero en 2019 lanzar con Tool Fear Inoculum, un disco del que puedo decir muchas cosas y pocas de ellas buenas. Tras mi cabreo con el viticultor de Arizona, me dispuse a escuchar su nuevo trabajo con Pusicfer, titulado The Reckoning.

Y mi lado romántico para con la figura de Maynard volvió a la luz. Mientras Tool es la máquina de billetes de Maynard y cía, Puscifer es el proyecto en donde MJK vuelca su enorme potencial artístico y sus inmensa necesidad de experimentar musicalmente.

Existencial Reckoning posee un sonido oscuro, magnético y cautivador. Los teclados de Carina Round inundan todos los rincones en este disco, como si de una banda new wave ochentera se tratase. La guitarra desparece en muchos momentos del álbum y Pusicfer con su talento consiguen que no se eche de menos. La voz de Maynard -muchas veces en segundo plano- acompañada de los coros de Carina consiguen una combinación casi mágica.

Viva Belgrado – Bellavista

Viva Belgrado son una de las mejores bandas nacionales surgidas esta década. Los cordobeses han conseguido con solo tres álbums de estudio hacerse un hueco en nuestro corazón. Sus letras directas, íntimas y explícitas han conseguido cautivar a miles de personas. Ya hice una review en el mes de mayo hablando de este disco en profundidad.

El sonido screamo inicial de la formación ha evolucionado con el paso de los años, atreviéndose en Bellavista a añadir sonidos que van desde el lofi-pop hasta el flamenco. Una apuesta arriesgada pero efectiva.

Ulver – Flowers of Evil


Ulver son una banda profundamente polifacética y con mil caras musicales. A pesar de haber nacido musicalmente en la escena black noruega de los 90’s, destacaron desde un primer momento por tener un sonido mucho más cercano al folk metal, al igual que sus compatriotas Enslaved. Sin embargo, con la llegada del nuevo milenio fueron abrazando lentamente el rock progresivo con una componente dark wave muy importante. Y estos últimos años han vuelto a dar un giro de 180º a su estilo.

Los Ulver actuales han abrazado a manos llenas la música electrónica y el synth-pop. Uniéndose así a esta nueva oleada de artistas clásicos como Steven Wilson y Pain of Salvation que han abandonado la guitarra por el sintetizador.

Flowers of Evil es, al igual que su predecedor (The Assasination of Julius Caesar, 2017), un disco completamente dominado por los sintetizadores y las baterías de corte electrónico. Tore Ylwizaker, teclista de la banda, es capaz de conseguir durante los 37 minutos que dura el disco que te olvides completamente de las guitarras, puesto que sobre él recae el eje central de este disco.

Una apuesta arriesgada la de los nuevos Ulver, pero muy efectiva y tremendamente bien encaminada.

MENCIONES DE HONOR:

Puesto que hablar de todos y cada uno de los discos que he escuchado este año es inviable en lo que a tiempo se refiere, me gustaría citar con mención de honor los siguientes trabajos, que se quedaron a las puertas de haber entrado en el Top10:

1000mods – Youth of Disent

Deftones – Ohms

Frutería Toñi – El Porvenir Está en las Huevas

Haken – Virus

Plini – Impulse Voices

This Will Destroy You – Vespertine

Touché Amoré – Lament

RESUMEN DEL 2020:
Disco del año: I Disagree (Poppy)

Artista del año: Anathema, una de mis bandas favoritas, quienes no pudieron resistir el envite económito de la pandemia y anunciaron hiatus indefinido.

Decepción del 2020: La respuesta de las autoridades, tanto a nivel nacional como regional, con el sector de la cultura. Espero y deseo de todo corazón que este 2021 uno de los sectores que más nos sostuvo a nivel emocional y psicológico durante la etapa de confinamiento recupere parte del espacio que le ha sido arrebatado, extremando en todo momento las medidas de seguridad.

Mayor Sorpresa del 2020: La titánica adaptación que ha hecho una buena parte del sector de la música a los tiempos de pandemia. Un enorme aplauso a todos esos artistas que han podido reinventarse en estos tiempos tan aciagos.

Disco más esperado del 2021: Steven Wilson – The Future Bites. En menos de un mes tendréis crónica del disco en esta web escrita por un servidor.